Juan tiene una nueva vecina, Emma, y decide darle la bienvenida invitándola a tomar el té, algo inusual en él. La compañía de Emma le maravilla y contraría a la vez. Emma es curiosa y extrovertida y le invita a cenar al día siguiente. Entonces Juan decide obsequiarla con algo más propio a su carácter y la sorpresa del regalo genera un desencuentro entre las personalidades contrarias de Emma y Juan. Pero, los contrarios se complementan y Emma y Juan están a puntos de vivenciarlo. Con el uso de ilustraciones llenas de movimiento, que se centran en el blanco y el negro al retratar a Juan y muestran una amplia paleta de colores vivos cuando se trata de Emma, Amalia Satizábal logra un lenguaje sumamente expresivo en la ilustración y un complemento a la sencillez textual de la obra.
Juan tiene una nueva vecina, Emma, y decide darle la bienvenida invitándola a tomar el té, algo inusual en él. La compañía de Emma le maravilla y contraría a la vez. Emma es curiosa y extrovertida y le invita a cenar al día siguiente. Entonces Juan decide obsequiarla con algo más propio a su carácter y la sorpresa del regalo genera un desencuentro entre las personalidades contrarias de Emma y Juan. Pero, los contrarios se complementan y Emma y Juan están a puntos de vivenciarlo. Con el uso de ilustraciones llenas de... Seguir leyendo
Emma y Juan
Esa mañana –como siempre–, todo estaba en orden en casa de Juan. Entonces, escuchó