El autor nos traslada a un mundo siempre salvaje, impregnado de fantasía, de amor y de crueldad: es la vida misma lo que, en realidad, retrata Quiroga en sus cuentos. Así sucede, por ejemplo, en el cuento titulado La guerra de los yacarés, en el que estos animales se enfrentan a los hombres porque el trasiego de sus barcos de vapor por el río los está dejando sin peces para alimentarse. O en La tortuga gigante donde un hombre gravemente enfermo es llevado a rastras por una tortuga desde el monte a la ciudad para que puedan curarle los médicos, o en El loro pelado, donde un loro amaestrado ayuda a su dueño a cazar a un feroz tigre al que distrae hablándole. En definitiva, casi todas las emociones humanas se dan cita en estos cuentos para el deleite de los lectores.
El autor nos traslada a un mundo siempre salvaje, impregnado de fantasía, de amor y de crueldad: es la vida misma lo que, en realidad, retrata Quiroga en sus cuentos. Así sucede, por ejemplo, en el cuento titulado La guerra de los yacarés, en el que estos animales se enfrentan a los hombres porque el trasiego de sus barcos de vapor por el río los está dejando sin peces para alimentarse. O en La tortuga gigante donde un hombre gravemente enfermo es llevado a rastras por una tortuga desde el monte a la ciudad para que puedan curarle los... Seguir leyendo
Cuentos de la selva
El loro pelado
Había un avez una banda de loros que vivía en el monte.
De mañana temparano iban a comer choclos a la chacra, y de tarde comían naranjas. hacían gran barullo con sus gritos, y tenían siempre un loro de centinela en los árboles más altos, para ver si venía alguien.