El uso del sombrero confiere elegancia al portador, sea hombre o mujer, resulta útil en cada estación del año y está considerado un complemento muy práctico. El Señor Crockett lo sabe bien, por eso lleva muchos años confeccionando de forma artesanal los mejores modelos para los más distinguidos clientes, desde mercaderes del Lejano Oriente hasta brujas y príncipes. Sin embargo hay un mago que va a realizar un encargo muy especial, no es una chistera ni un bombín ni un salacot, es un sombrero fantabuloso que exige toda el esfuerzo del protagonista. El inconfundible paisaje gráfico de Olmos se exhibe con toda su majestuosidad en los distintos escenarios que Crockett recorre estudiando la forma de modelar su proyecto, con personajes y objetos pintados al óleo y sometidos a posterior tratamiento digital.
El uso del sombrero confiere elegancia al portador, sea hombre o mujer, resulta útil en cada estación del año y está considerado un complemento muy práctico. El Señor Crockett lo sabe bien, por eso lleva muchos años confeccionando de forma artesanal los mejores modelos para los más distinguidos clientes, desde mercaderes del Lejano Oriente hasta brujas y príncipes. Sin embargo hay un mago que va a realizar un encargo muy especial, no es una chistera ni un bombín ni un salacot, es un... Seguir leyendo
Un sombrero fantabuloso
Hay sombreros y sombreros.
Sombreros elegantes y sombreros ridículos.
Sombreros con cinta y sin cinta.
Con pluma y sin pluma.
Para el sol y para la lluvia.
Para jugar o para aburrirse.