Publicado originalmente en los años cincuenta del siglo XX, el tiempo y la fama de otras obras han contribuido a potenciar el filtro mágico por el que parecen pasar las historias de este autor irrepetible convirtiendo el universo de Kenny en un clásico de culto. El protagonista nos invita a cruzar la ventana de los sueños, escapar de la rutina y sumergirnos en sus ideas, temores y deseos. Con la brisa que genera el disfrute de una colección de pequeñas obras de arte, estampas cargadas de lirismo y sensibilidad, el lector puede reflexionar sobre el valor del afecto en las relaciones personales, así como las esperanzas e incertidumbres que el género humano tiene ante el futuro. Con la “simple” ayuda de unos cuantos juguetes y su mascota, la habitación del pequeño se convierte en plataforma de despegue para todos nuestros anhelos, confirmando a Sendak como uno de los grandes poetas gráficos de la LIJ.
Publicado originalmente en los años cincuenta del siglo XX, el tiempo y la fama de otras obras han contribuido a potenciar el filtro mágico por el que parecen pasar las historias de este autor irrepetible convirtiendo el universo de Kenny en un clásico de culto. El protagonista nos invita a cruzar la ventana de los sueños, escapar de la rutina y sumergirnos en sus ideas, temores y deseos. Con la brisa que genera el disfrute de una colección de pequeñas obras de arte, estampas cargadas de lirismo y sensibilidad, el... Seguir leyendo
La ventana de Kenny
Kenny se despertó en mitad de un sueño. Y recordó un jardín.
"En mi sueño he visto un jardín -pensó Kenny- y un árbol."
Era un árbol cubierto de flores blancas. Y sobre el árbol brillaban a la vez el sol y la luna.