Desde las primeras frases, la historia de Teo desprende el dulce sabor de los relatos de antaño. El cuento nos traslada a un ecosistema rural, en el que las habilidades del protagonista son muy apreciadas y respetadas por sus vecinos. La belleza de los grabados, una original combinación de técnicas que representan escenas del trabajo agrícola y paisajes evocadores de otro siglo, ayudan a comprender la maestría de un hombre trabajador y humilde, primo hermano de otros personajes posteriores nacidos en el cine o la literatura, como el burtoniano Eduardo Manostijeras o, en menor medida, El Jardinero de Tagore . El equilibrio de su creativa vida en la granja se rompe cuando aparece un hombre perteneciente a otro estatus social, el rico Damián del Oro, quien pretende someter a Teo, a base de promesas y proposiciones sugerentes, para convertir con su trabajo amplias propiedades en los más bellos jardines del país. Un texto elegante, en el que asoman algunos valores fundamentales, al que el trabajo gráfico complementario convierte en pequeña joya de orfebrería.
Desde las primeras frases, la historia de Teo desprende el dulce sabor de los relatos de antaño. El cuento nos traslada a un ecosistema rural, en el que las habilidades del protagonista son muy apreciadas y respetadas por sus vecinos. La belleza de los grabados, una original combinación de técnicas que representan escenas del trabajo agrícola y paisajes evocadores de otro siglo, ayudan a comprender la maestría de un hombre trabajador y humilde, primo hermano de otros personajes posteriores nacidos en el cine o la literatura, como... Seguir leyendo
Teo Muchosdedos
Érase que se era un hombre llamado Teo Muchosdedos. Si le llamaban así no era porque tuviese más dedos de los que tenemos todos, sino porque, con los mismos que tenemos tú y yo, él parecía hacer mucho más que los demás.
- Es el hombre más hábil que he conocido en mi vida -solía decir el pescadero, que vivía en una casa cercana a la de Teo y le tenía en gran estima.