Los cuadernos de viaje se han convertido en un género propio dentro del mundo del cómic e incluso del álbum ilustrado. Desde las crónicas de Sacco o Guy Delisle, hasta las vivencias de Craig Thompson o Miguel Gallardo, pasando por las poéticas aventuras de Jiro Taniguchi o las extraordinarias crónicas de Guibert, Lefèvre y Lemercier o Morvan, podemos disfrutar de un innumerable acervo de títulos que sirven para descubrir otras realidades, sondear los conflictos políticos, sociales y bélicos que sufren en distintas latitudes o, simplemente, deleitarnos con la mera descripción de travesías a diferentes lugares. La célebre revista Altaïr apuesta por este formato para ofrecer una fascinante aventura periodística por medio mundo, a través de la mirada de algunos de los más destacados narradores y artistas gráficos existentes en la actualidad. La portada, del propio Gallardo, invita a recorrer un mapa con catorce puntos bien definidos. Rima y Dabitch exponen una crónica urbana, jalonada de cierta tensión, por Beirut. Glidden abandona su condición de valiente reportera para ejercer como sencilla turista por las calles de Florencia. Peter Kuper esboza sus recuerdos mexicanos; Alba y Martínez siguen el mismo patrón para mostrar sus recuerdos australianos. Abirached radiografía Berlín a través de los ojos de una emigrante. Carla Berrocal adapta una historia sobre Rusia perfectamente exportable al género de espías. Mijangos reflexiona sobre el mero hecho de movernos con una poética creación gráfica…
La obra está prologada por Jorge Carrión, escritor y crítico vinculado a The New York Times, entre otras prestigiosas publicaciones, quien analiza de forma certera la experiencia de viajar y su necesaria correspondencia en viñetas (o en otros medios visuales), a través de un breve pero intenso recorrido espacio-temporal. La exquisita edición incluye una alternancia de relatos en formato cómic, con diversos modelos de secuenciación, y otros en clave de esbozos ilustrados y cronogramas, que se acompañan de numerosas sugerencias complementarias para seguir viajando en viñetas y bocadillos. Un imprescindible documento que fusiona periodismo, aventura y cultura viajera que no debe faltar en las estanterías de cualquier amante del noveno arte.

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