¡Qué triste y aburrida sería la vida sin amigos! Meritxell Duran compila un pequeño catálogo de almas gemelas, niños y niñas conectados por simpáticas características y afinidades que solo podemos descubrir interactuando con las ilustraciones. Cada personaje incluye un sencillo troquel mediante el que apreciamos las peculiaridades. El texto une a unos protagonistas con otros a través del humor e invita a jugar a pequeños con mayores en el descubrimiento de esta entrañable pandilla. La propuesta desemboca en una escena pop-up de mayores dimensiones, un epílogo ideal para un relato divertido con el que podemos despertar la curiosidad e incentivar el amor por el diferente. El diseño gráfico, también sobresaliente, es obra del barcelonés Enric Jardí.

¡Qué triste y aburrida sería la vida sin amigos! Meritxell Duran compila un pequeño catálogo de almas gemelas, niños y niñas conectados por simpáticas características y afinidades que solo podemos descubrir interactuando con las ilustraciones. Cada personaje incluye un sencillo troquel mediante el que apreciamos las peculiaridades. El texto une a unos protagonistas con otros a través del humor... Seguir leyendo