Entre las calles de una ciudad, como casi todas, atestada de coches, autobuses y tubos de escape, Juanito sueña con surcar las rúas con una bicicleta. Su padre, una tarde, comienza a construir el engranaje de su regalo, un vehículo único y exclusivo con el que podrá seguir descubriendo los secretos de la gran urbe. Las dudas, los sueños, temores y, sobre todo, la ilusión del pequeño sirven como eje conductor para un relato construido en cuartetos con rima consonante e ilustrado con elegancia. Los personajes y escenarios, espigados y rebosantes de luz, recuerdan la estética de los publicistas y cartelistas de la primera mitad del siglo XX y aportan un matiz exclusivo a esta bella propuesta, un sincero elogio del velocípedo, ideal para comenzar a degustar la poesía en pequeñas dosis.
Entre las calles de una ciudad, como casi todas, atestada de coches, autobuses y tubos de escape, Juanito sueña con surcar las rúas con una bicicleta. Su padre, una tarde, comienza a construir el engranaje de su regalo, un vehículo único y exclusivo con el que podrá seguir descubriendo los secretos de la gran urbe. Las dudas, los sueños, temores y, sobre todo, la ilusión del pequeño sirven como eje conductor para un relato construido en cuartetos con rima consonante e ilustrado con elegancia. Los personajes y escenarios, espigados... Seguir leyendo
La bicicleta amarilla
1. Grande es el cuerpo metropolitano,
ciudad de tranvías y ruedas con motor,
paradas, luces, un bus que va a metano
lleno de gentes de distinto color.
Muchos vienen de un lugar lejano
en busca de la suerte y el buen humor.
Pero quién vive una vida tranquila
en bicicleta va ¡qué maravilla!