¿Recordáis los "problemas gatunos" de Buster? Pues sigue obsesionado con los mismos temores. Cada noche realiza una vuelta de reconocimiento por toda la casa en busca de otros espíritus a los que identificar. En el comienzo del segundo episodio de sus aventuras, parece que todas las habitaciones están libres de personajes extraños, pero unos ruidos alertan al minino de que ocurre algo extraño en el salón. Un pequeño y errático colega de especie, aparentemente desorientado pero con unas capacidades sorprendentes, reclama la atención y ayuda del protagonista, que pasa la noche en vela por su culpa. Cebollín puede realizar rápidos vuelos sin necesidad de saltar, aunque la sucesión de peligros con los que se encuentra la nueva pareja de amigos a menudo no permite mostrar sus habilidades (una pandilla de patos enfadados, un perro muy peligroso, un humano de la sección "Control de animales"...) La travesía pondrá en contacto a los gatos con viejos amigos y pondrá en valor la principal cualidad de Buster: ayudar a los demás. Juntos tratan de encontrar el hogar perdido del misterioso invitado, descubriendo al lector una tierna y emotiva realidad que conmoverá, especialmente, a los aficionados a estas mascotas en el epílogo. El diseño de los personajes y escenarios está en consonancia con las tonalidades cromáticas y el estilo conocido como kawaii.
¿Recordáis los "problemas gatunos" de Buster? Pues sigue obsesionado con los mismos temores. Cada noche realiza una vuelta de reconocimiento por toda la casa en busca de otros espíritus a los que identificar. En el comienzo del segundo episodio de sus aventuras, parece que todas las habitaciones están libres de personajes extraños, pero unos ruidos alertan al minino de que ocurre algo extraño en el salón. Un pequeño y... Seguir leyendo
PROBLEMAS GATUNOS
- Z
- JO, TÍO.
- ¿QUÉ HORA ES?
- ¡OSTRÍS! DEBERÍA IRME A LA CAMA
- ¿NO TIENES SUEÑITO, BUSTER?
- ¿BRRT?
- MOW
HOP!
- ¡CARAY!, JE, JE
- NO PODÍA FALTAR EL CORRETEO NOCTURNO, ¿EH?
- ¡NI RASTRO DE ESPÍRITUS!