Hay un gran alboroto en la granja. Las gallinas han puesto diez huevos, pero solo aparecen nueve. Enfurecidas, se organizan para consultar a todos los habitantes de la hacienda en busca de posibles pistas que aclaren el misterio. Consultadas vacas, cerdos, patos, ovejas y demás vecinos de buena voluntad, desenmascaran al culpable, gracias a un pequeño gesto que, en idioma gallinil, delata al personaje. ¿Imaginas quién es? ¿Qué razones han provocado este robo? Tras un aparentemente sencillo hilo argumental, la autora reflexiona sobre determinadas conductas sociales e invita a derribar clichés. El libro ilustrado posee dos niveles de lectura que garantizan la posibilidad de un debate o coloquio posterior en el que el cuento sirve como base para conversar con los más pequeños. La propuesta gráfica corre a cargo de la artista coruñesa Laura Tova, que dibuja en trazos frescos y desprovistos de artificios el día a día de la finca y los sentimientos y emociones de los animales humanizados protagonistas.
Hay un gran alboroto en la granja. Las gallinas han puesto diez huevos, pero solo aparecen nueve. Enfurecidas, se organizan para consultar a todos los habitantes de la hacienda en busca de posibles pistas que aclaren el misterio. Consultadas vacas, cerdos, patos, ovejas y demás vecinos de buena voluntad, desenmascaran al culpable, gracias a un pequeño gesto que, en idioma gallinil, delata al personaje. ¿Imaginas quién es? ¿Qué razones han provocado este robo? Tras un aparentemente sencillo hilo argumental,... Seguir leyendo
El gallo que puso un huevo
Las gallinas estaban furiosas.
Aquella mañana
habían puesto diez huevos.
¡Estaban seguras!
Pero en el gallinero
solo había nueve.