Está confirmado por la ciencia: la siesta es un acto saludable y muy necesario en la edad de nuestros protagonistas, un grupo de amigos y compañeros de clase a los que conocemos bien de anteriores propuestas de Frédéric Stehr. En el mismo escenario de juegos que anteriores propuestas, los pequeños animales humanizados comparten ese momento de relajación y descanso, aunque en realidad de ambas cosas tiene muy poco porque la imaginación, en este periodo, es tan desbordante que el juego supera a la necesidad de desconexión. ¿Qué ocurrirá cuando lleguen los padres? ¿Aguantarán de verdad tantas horas sin tener un pequeño sueño? Una nueva trama en la colección de propuestas para lectores que están dando sus primeros pasos autónomos, respeta como siempre los conceptos básicos apropiados en los materiales dirigidos a esta edad (puntas redondeadas, papel de buen gramaje, peso reducido y dimensiones manejables por los más pequeños). Las ilustraciones mantienen el tono de anteriores propuestas y centran el foco en la representación física de los simpáticos personajes que conforman la panda en línea clara.

Está confirmado por la ciencia: la siesta es un acto saludable y muy necesario en la edad de nuestros protagonistas, un grupo de amigos y compañeros de clase a los que conocemos bien de anteriores propuestas de Frédéric Stehr. En el mismo escenario de juegos que anteriores propuestas, los pequeños animales humanizados comparten ese momento de relajación y descanso, aunque... Seguir leyendo