Sencilla y a la vez original narración rimada que nos presenta a una Caperucita preocupada por un lobo glotón, que sólo piensa en comer golosinas. A lo largo de la historia van apareciendo nuevos personajes que le ofrecen al lobo comida sana, que él rechaza. El texto tiene estrofas que repite cada personaje que aparece en escena. Además, cada uno ellos añade otra nueva. De este modo, las autoras consiguen crear una tierna historia rimada, acumulativa y repetitiva, con musicalidad y ritmo, apropiada para leerla en voz alta.
Sencilla y a la vez original narración rimada que nos presenta a una Caperucita preocupada por un lobo glotón, que sólo piensa en comer golosinas. A lo largo de la historia van apareciendo nuevos personajes que le ofrecen al lobo comida sana, que él rechaza. El texto tiene estrofas que repite cada personaje que aparece en escena. Además, cada uno ellos añade otra nueva. De este modo, las autoras consiguen crear una tierna historia rimada, acumulativa y repetitiva, con musicalidad y ritmo, apropiada para leerla en voz alta.
Una rica merienda
Hoy es jueves por la tarde
y allá va Caperucita,
con su cestita en el brazo
a casa de su abuelita.
Lleva fruta, requesón,
miel de abeja y una tarta;
pan de avena y espinacas,
sardinas y salchichón.