En este libro se plantea la situación de los niños, que en muchos países, se ven obligados a trabajar para ayudar a sus familias. A través de un espléndido recorrido fotográfico y del relato de una simpática narradora, se presentan los trabajos que distintos niños de El Salvado realizan antes de asistir a la escuela. El tratamiento del tema es equilibrado y positivo, pero el testimonio de los personajes y del reportaje fotográfico muestra que los derechos de la infancia no son todavía una realidad universal.
En este libro se plantea la situación de los niños, que en muchos países, se ven obligados a trabajar para ayudar a sus familias. A través de un espléndido recorrido fotográfico y del relato de una simpática narradora, se presentan los trabajos que distintos niños de El Salvado realizan antes de asistir a la escuela. El tratamiento del tema es equilibrado y positivo, pero el testimonio de los personajes y del reportaje fotográfico muestra que los derechos de la infancia no son todavía una realidad universal.
T de trabajo infantil
La primera vez que fui a vender cebollas al mercado de Soyapango, hace tres años no vendí ninguna. Era muy vergonzosa. Mi hermana mayor me dijo: No seas tonta, la gente necesita cebollas para cocinar y tú las vendes, así que grita a los cuatro vientos que tienes cebollas. Me llamo Virginia Torres, tengo once años y soy la mejor vendedora ambulante del mercado.