A través de los ojos de un niño de seis años, observamos cómo reacciona ante distintos acontecimientos de la vida cotidiana como son la muerte de un ser querido, la llegada de una nueva hermana y la pérdida de sus mascotas. Su visión difiere en gran medida de la de sus progenitores, lo cual le provoca gran desconcierto. Las ilustraciones se coordinan perfectamente con el texto, jugando con las formas y colores para expresar distintas sensaciones. Cabe destacar por ejemplo, las distintas alusiones al paso del tiempo.
A través de los ojos de un niño de seis años, observamos cómo reacciona ante distintos acontecimientos de la vida cotidiana como son la muerte de un ser querido, la llegada de una nueva hermana y la pérdida de sus mascotas. Su visión difiere en gran medida de la de sus progenitores, lo cual le provoca gran desconcierto. Las ilustraciones se coordinan perfectamente con el texto, jugando con las formas y colores para expresar distintas sensaciones. Cabe destacar por ejemplo, las distintas alusiones al paso del tiempo.
Ramona la mona
Hola, me llamo Bruno y tengo casi 6 años. Esta es mi casa. Antes vivíamos aquí mi mamá, mi papá, mis abuelos, 5 peces anaranjados y yo.
Luego vino a vivir con nosotros Fola, una gata roja de afilados dientes. Éramos 11 en la casa azul.
Una mañana de domingo salimos a pasear y, cuando regresamos, los peces ya no estaban. Fuimos 5 menos viviendo en la casa azul.