Los datos son, en general, muy positivos, destacando una idea en la que la Fundación Germán Sánchez Ruipérez lleva reafirmando desde hace tiempo: el porcentaje de lectores de libros es especialmente destacable entre los jóvenes. Además se confirma que los lectores por ocio en su tiempo libre continuaron su crecimiento en 2022, consolidándose así el crecimiento en los índices de lectura experimentado durante la pandemia.
Según el estudio, el porcentaje de la población española que leyó algún libro durante al pasado año, ya sea por ocio o por trabajo, alcanzó el 68,4%. Si nos referimos solo a aquellos que leyeron por ocio en su tiempo libre, el porcentaje se situó en el 64,8%, una cifra ligeramente superior a la del año pasado, cifra que se incrementa hasta el 66,2 si añadimos a aquellas personas que sólo leyeron cómics en su tiempo libre.
El estudio repasa los últimos diez años con un balance muy halagüeño, ya que desde el 2012 el índice de lectura en tiempo libre ha crecido 5,7 puntos porcentuales y los datos sobre lectores ocasionales se han mantenido sin apenas variaciones estos años.
Se mantiene la descripción de años atrás del "lector más frecuente": mujer con estudios universitarios de entre 25 y 34 años. Por tramos de edad la mayor población lectora es la que hoy tiene entre 14 y los 24 años. En lo que respecta a los mayores, desde 2012 el porcentaje de lectores con 65 y más años se ha incrementado por encima de la media de crecimiento general.
En cuanto a los niveles de estudio en todos los niveles se observan crecimientos de los índices de lectura, siendo inferiores entre los que tienen estudios secundarios. Lo mismo ocurre si desglosamos la información por Comunidades Autónomas, en todas ellas ha crecido o se ha mantenido sin cambios el número de lectores en tiempo libre, situándose a la cabeza Madrid. Le siguen en esta particular clasificación Cataluña, Navarra y País Vasco. El castellano es la lengua preferida, incluso en aquellas CCAA que cuentan con lengua autonómica.
Los niños y adolescentes los más lectores
Tal y como avanzaba el informe La lectura según los jóvenes, de FGSR, presentado en la edición 2021 de LIBER y en diversos foros europeos se confirman los altos porcentajes de lectura actuales entre los menores de 18 años, especialmente entre los chicos y chicas de entre 10 y 14 años. El 85,6% de estos leen en su tiempo libre de forma frecuente. Entre los jóvenes entre 15 y 18 años el porcentaje alcanza el 79,2%.
La lectura infantil se mantiene en valores elevados. Crece ligeramente la proporción e niños que leen libros no de texto. Aunque también se desvelan datos que invitan a reflexionar, como el descenso (aunque ligero) del tiempo semanal dedicado a la lectura a los más pequeños.
A pesar de todos estos apuntes positivos un buen número de españoles vive de espaldas a la lectura. Entre las razones que se esgrimen siguen apareciendo la falta de tiempo libre (a la cabeza, con un 44%); una buena parte que prefiere emplear su tiempo libre en otros entretenimientos como pasear, descansar o ver series y películas, y hasta un 29% que declara una total falta de interés.
En cuanto a los soportes más demandados, las preferencias digitales se mantienen estables (un 29,5% de la población de 14 o más años lee libros en ese formato); con el e-reader y las tabletas como dispositivos más utilizados. Igualmente la lectura en teléfono móvil mantiene su tendencia creciente.
Otro dato preocupante es que de este grupo solo un 39% paga por los libros que disfruta, un porcentaje notablemente inferior a los que descargan obras de forma gratuita, lectores que son totalmente conscientes de que se trata de una actividad ilegal. Respecto a los audiolibros, en 2022 se estabilizó su número de usuarios aunque principalmente por lectores de menos de 35 años.
El porcentaje de población española que ha comprado algún libro (no de texto) durante el último año ha ido en aumento desde 2012, y en 2022 la cifra se sitúa en un 52,8%, 12,5 puntos más que hace diez años, siendo la librería "tradicional" el principal canal de compra, aunque en el caso de los jóvenes son las plataformas en internet las más usadas para ello.
¿Y las bibliotecas?
En 2022 el número de usuarios de estos espacios culturales ha crecido un punto respecto al año anterior aunque aún no se ha recuperado el uso que existía antes de la pandemia. De entre los tipos de bibliotecas existentes, las más visitadas son las públicas.
Los españoles otorgan una valoración muy positiva a su biblioteca habitual y le dan un notable alto. Esto se repite en todas las comunidades autónomas, con Cataluña a la cabeza seguida de País Vasco, Castilla y León y Cantabria.
Fuente: MCD
