Una fábula enternecedora que habla de cómo el carácter puede cambiar gracias al amor. En este caso, el zorro, arisco y violento, se ve haciendo de padre con el pollito que luego será pato y tendrá patitos, y todos juntos formarán una familia en la que la figura protectora del zorro será fundamental. Un álbum ilustrado en el que la ilustración es muy expresiva y transmite mucha fuerza. Un cuento con el que se podrá trabajar el carácter –la rebeldía, el mal genio, etc.– para poner de relieve cómo al limarlo uno se relaciona mejor, desde el cariño.
Una fábula enternecedora que habla de cómo el carácter puede cambiar gracias al amor. En este caso, el zorro, arisco y violento, se ve haciendo de padre con el pollito que luego será pato y tendrá patitos, y todos juntos formarán una familia en la que la figura protectora del zorro será fundamental. Un álbum ilustrado en el que la ilustración es muy expresiva y transmite mucha fuerza. Un cuento con el que se podrá trabajar el carácter –la rebeldía, el mal genio, etc.– para poner de relieve... Seguir leyendo
Todos sus patitos
En un bosque... se encontraba una pata a la orilla de un lago. Debajo de ella, había un huevo y en el huevo, un polluelo y éste no tenía nombre. Naturalmente, en ese bosque vivía un zorro. El zorro no tenía ningún huevo, tampoco polluelos. El zorro tenía hambre. ¡Mucha hambre! Donde hay hambre, hay ruido porque un estómago vacío gruñe. Quien tiene hambre, piensa en comida y en conseguirla; piensa, por ejemplo, en patos. En atrapar patos, comer patos, en ese tipo de cosas. El zorro se llama Konrad.