El recuerdo es tortuoso. Se ha convertido en pesadilla cotidiana y necesita salir al exterior. Los jóvenes soldados que estuvieron en Sabra y Chatila, a comienzos de los 80, son hoy hombres que no aciertan a entender masacres como las que se narran, matanzas que vivieron en primera persona y trastornaron su existencia para siempre. Las emociones que el protagonista siente al intentar conocer la verdad, le llevan a entrevistarse con amigos y compañeros ex soldados, charlas que confirman la tenebrosa realidad que las dos partes del conflicto vivieron en el Líbano a consecuencia de una guerra, como todas, inútil.
Nominado al Óscar en su versión para cine, el cómic experimenta con las técnicas digitales, concede especial importancia a los cartuchos narrativos y a las sombras, las mismas que se ciernen sobre la memoria de los hechos, y combina en algunos momentos fotografía y dibujo, un camino iniciado en su día por Lefèvre, Guibert y Lemercier.
El recuerdo es tortuoso. Se ha convertido en pesadilla cotidiana y necesita salir al exterior. Los jóvenes soldados que estuvieron en Sabra y Chatila, a comienzos de los 80, son hoy hombres que no aciertan a entender masacres como las que se narran, matanzas que vivieron en primera persona y trastornaron su existencia para siempre. Las emociones que el protagonista siente al intentar conocer la verdad, le llevan a entrevistarse con amigos y compañeros ex soldados, charlas que confirman la tenebrosa realidad que las dos partes del conflicto vivieron en el Líbano a... Seguir leyendo
Vals con Bashir
La noche que llamó Boaz fue la peor de aquel invierno. Era enero de 2006. Nada en nuestros treinta años de amistad me había preparado para lo que me iba a contar.
Los perros llevan dos años viniendo, me dijo.
Veintiséis perros.
Veo sus caras malignas desde la ventana. Han venido a matarme.
Le dicen a Bertold, el propietario del negocio de abajo: danos la cabeza de Boaz Rein o nos comemos a tus clientes. Tienes un minuto.