La complicidad que existe entre un hijo y una madre constituye un poético recurso para el juego, la broma y, finalmente, la sincera confesión del afecto máximo. Es la hora de dormir y el niño reclama las palabras precisas y exactas, demanda los versos y relatos que le hagan sentirse seguro, la declaración de un amor robusto y fiel, risas y caricias en forma de pequeñas ilustraciones y bocadillos que simbolizan el querer. No se necesitan muchos verbos para expresar lo que se ama, lo verdaderamente importante cabe en un bolsillo, como este simpático mini álbum ilustrado que Lata de Sal publica, por primera vez en español, dentro de su colección Vintage, una dulce conversación que vio la luz, originalmente, hace más de 50 años, y que seguirá repitiéndose otros 50 años después en cualquier otro hogar…
La complicidad que existe entre un hijo y una madre constituye un poético recurso para el juego, la broma y, finalmente, la sincera confesión del afecto máximo. Es la hora de dormir y el niño reclama las palabras precisas y exactas, demanda los versos y relatos que le hagan sentirse seguro, la declaración de un amor robusto y fiel, risas y caricias en forma de pequeñas ilustraciones y bocadillos que simbolizan el querer. No se necesitan muchos verbos para expresar lo que se ama, lo verdaderamente importante cabe en un bolsillo, como este... Seguir leyendo
Te Quiero
¿Sabes qué?
Te quiero
Porque...
Contigo me siento bien.
(Podría decirlo una y otra vez).
Lo digo ahora,
Lo diré
después