Atrapados en Riparia
El miércoles llegué a Riparia con Ana. Para este agosto hemos alquilado la casa solitaria de los cuatro caminos. Elegimos la isla porque reúne las condiciones necesarias para poner en orden nuestros asuntos matrimoniales. Buscamos paz, un ambiente tranquilo, vida de pueblo, silencio, calma. Tiempo para charlar sin sobresaltos, sin compromisos apremiantes de amigos o sociales. Mi última infidelidad ha colmado su paciencia.