Este libro, ganador del IX Premio «Leer es vivir», da muestras de la riqueza de la imaginación infantil, que impregna cada momento de la vida de la protagonista. Lo sencillo y cotidiano se convierte en fantástico y entrañable desde el punto de vista de Pina. Su cálida relación con la abuela –una niña grande– aporta ternura y sentido del humor a este relato intimista. Este libro, ganador del IX Premio «Leer es vivir», da muestras de la riqueza de la imaginación infantil, que impregna cada momento de la vida de la protagonista. Lo sencillo y cotidiano se convierte en fantástico y entrañable desde el punto de vista de Pina. Su cálida relación con la abuela –una niña grande– aporta ternura y sentido del humor a este relato intimista.

En las nubes

A simple vista, la habitación de Pina no tiene nada de particular. Es estrecha, hay manchas rosas en la pared, varios estantes llenos de tebeos y libros, y una gran bola del mundo colgando del techo.
A un lado, una cama con una colcha azul reposa debajo de una ventana. Frente a la cama, unos caballetes sostienen un tablero blanco sobre el que un tren amarillo espera la orden de salida.
Al fondo, se alza un viejo armario de roble.