Dos relatos marco que presentan un enigma sirven de pretexto para que una serie de personajes cuenten atractivas historias, hasta llegar a desvelar el misterio planteado. Alguno de los cuentos se relacionan entre sí o con el relato inicial y la mayoría de ellos están ambientados en las legendarias ciudades del Próximo Oriente. El ritmo cadencioso y ágil de la narración y la plasticidad de las descripciones sumergen al lector en una atmósfera mágica similar al de las Mil y Una Noches o de las leyendas centroeuropeas.
Dos relatos marco que presentan un enigma sirven de pretexto para que una serie de personajes cuenten atractivas historias, hasta llegar a desvelar el misterio planteado. Alguno de los cuentos se relacionan entre sí o con el relato inicial y la mayoría de ellos están ambientados en las legendarias ciudades del Próximo Oriente. El ritmo cadencioso y ágil de la narración y la plasticidad de las descripciones sumergen al lector en una atmósfera mágica similar al de las Mil y Una Noches o de las leyendas centroeuropeas.
La caravana de Wilhelm Hauff
Una gran caravana atravesaba el desierto. En la inmensa extensión, en la que no se veía otra cosa que arena y cielo, se anunciaba desde lejos con el sonido de los cencerros de los camellos y el tintineo de las sonajas de los caballos. Una densa nube de polvo la envolvía y solo en algunos trechos, cuando un soplo de viento desgarraba la polvareda que levantaba, se veían relampaguear armas o resplandecer ricos vestidos.