Impresión bajo sospecha
Miró por el ojo de la cerradura, como si se asomara a la luz de una estrella en medio de una noche tenebrosa. Al otro lado, en el espacio en forma de llave antigua que semejaba la silueta de un peón de ajedrez, pudo ver a un hombre inclinado sobre un tablero de juego. Tenía el codo apoyado en la mesa, el puño entrecerrado y encorvado, el mentón apoyado en los nudillos.