La llegada de un nuevo bebé al hogar supone un cambio en la vida del hermano mayor que le puede resultar difícil de llevar. Eso es lo que le ocurre a Elefantito que, para no despertar al bebé elefante, tiene que andar de puntillas, no puede zambullirse en el abrevadero ni comerse las hojas de las ramas sacudiendo el árbol entero. La cuidada encuadernación, la calidez de unas ilustraciones hechas con acuarelas y la sorpresa final del troquel tridimensional, con sonido añadido, hacen de este álbum una propuesta interesante.La llegada de un nuevo bebé al hogar supone un cambio en la vida del hermano mayor que le puede resultar difícil de llevar. Eso es lo que le ocurre a Elefantito que, para no despertar al bebé elefante, tiene que andar de puntillas, no puede zambullirse en el abrevadero ni comerse las hojas de las ramas sacudiendo el árbol entero. La cuidada encuadernación, la calidez de unas ilustraciones hechas con acuarelas y la sorpresa final del troquel tridimensional, con sonido añadido, hacen de este álbum una propuesta interesante.
¡Shh! ¡No despiertes al bebé!
A la sombra de los frondosos árboles y cerca del abrevadero, la Mamá Elefante acababa de acostar a su nuevo bebé. –Elefantito –le dijo a su hijo mayor–, por favor, ahora no hagas ruido, o despertarás al bebé.