En la China de los años 1950, Mao Zedong declaró la guerra a los gorriones en las zonas rurales. Este bello álbum ilustrado cuenta una historia llena de sensibilidad en la que, gracias a una niña, se logra restablecer el orden en la naturaleza. Aquellos que rompieron el equilibrio natural de las especies sufrieron sus consecuencias en las cosechas. Una historia que habla de ecología y de respeto al medio ambiente, y en la que a través de la sensibilidad de una niña se muestran estos valores.
En la China de los años 1950, Mao Zedong declaró la guerra a los gorriones en las zonas rurales. Este bello álbum ilustrado cuenta una historia llena de sensibilidad en la que, gracias a una niña, se logra restablecer el orden en la naturaleza. Aquellos que rompieron el equilibrio natural de las especies sufrieron sus consecuencias en las cosechas. Una historia que habla de ecología y de respeto al medio ambiente, y en la que a través de la sensibilidad de una niña se muestran estos valores.
La niña de los gorriones
Un día, se declaró una guerra en China.
–¡Los gorriones son nuestros enemigos! Se comen el grano de nuestras cosechas. ¡Tenemos que eliminarlos!
Hermano Mayor mostró la bolsa llena de petardos que su padre le había dado para la guerra contra los pájaros.
–Me gustan los gorriones –dijo Ming-Li en voz baja a su hermano mayor.
Miró hacia el cielo e intentó imaginarlo vacío y silencioso. Sus padres también estaban hablando de aquel plan.
–El granero del pueblo ahora está vacío pero ¡el año que viene estará lleno!