Una humilde manguera se convierte en la protagonista de esta historia sencilla y simpática. Su papel es crucial, puesto que cada vez que se produce un altercado, consigue restablecer la paz con un oportuno chorro que enfría los ánimos alterados y contagia a todos la alegría. Un argumento al alcance de los más pequeños con el que se promueve la convivencia y buena armonía en uno de los entornos donde la crispación hace mella más fácilmente, el urbano. Una humilde manguera se convierte en la protagonista de esta historia sencilla y simpática. Su papel es crucial, puesto que cada vez que se produce un altercado, consigue restablecer la paz con un oportuno chorro que enfría los ánimos alterados y contagia a todos la alegría. Un argumento al alcance de los más pequeños con el que se promueve la convivencia y buena armonía en uno de los entornos donde la crispación hace mella más fácilmente, el urbano.

¡Splash!

El señor Tomás vivía en una hermosa casa con un jardín lleno de flores y árboles frutales. Todos los días regaba el jardín con la manguera. Su jardín era el más bonito del barrio.Al señor Tomás le encantaba regar su jardín. También quería mucho a su manguera, que era fina, larga y verde brillante, como una serpiente.El señor Tomás pensaba que su manguera era muy especial, aunque no sabía por qué.