Pocas veces tenemos la oportunidad de ver los esbozos, bocetos, apuntes y dibujos que forman parte tanto del trabajo previo a un libro como de ese proceso creativo, sin un fin concreto, con la cual el ilustrador va generando su mundo propio. En muchas ocasiones al adentrarnos en este universo nos sentimos inspirados, nos saltan ideas nuevas o experimentamos un placer estético de especial intensidad. También después de ver estos bosquejos abordamos con otros ojos la obra del ilustrador, lo que propicia lecturas más atentas e interpretaciones más profundas. Por estas razones, un libro como éste merece llegar a manos de todos.
Pocas veces tenemos la oportunidad de ver los esbozos, bocetos, apuntes y dibujos que forman parte tanto del trabajo previo a un libro como de ese proceso creativo, sin un fin concreto, con la cual el ilustrador va generando su mundo propio. En muchas ocasiones al adentrarnos en este universo nos sentimos inspirados, nos saltan ideas nuevas o experimentamos un placer estético de especial intensidad. También después de ver estos bosquejos abordamos con otros ojos la obra del ilustrador, lo que propicia lecturas más atentas e... Seguir leyendo
El Rey Pájaro y otros esbozos
Suelo ser reacio a usar la palabra «inspiración» para presentar mi trabajo, pues suena como si, de pronto, una lluvia de rayos de sol pudiera caer encima de un individuo pasivo pero en un estado mental particularmente receptivo. Aunque lo cierto es que ese puede ser el caso en las raras ocasiones en las que se te ocurre una idea sin motivo aparente, la realidad acostumbra a ser mucho más prosaica. Si me pongo a observar una hoja de papel en blanco, nunca se me ocurre nada original; al contrario, experimento una falta de inspiración absoluta, no me siento nada receptivo. Se trata de ese famoso y molesto estado que se conoce como «bloqueo del artista».