Historia de vida cotidiana protagonizada por una familia en la que se producen una serie de circunstancias que hacen que los unos se enfaden con los otros, hasta que un pequeño gran gesto de la mascota les devuelve la armonía. La propuesta destaca por sus ilustraciones, fotografías de figuras en relieve elaboradas con plastilina.Historia de vida cotidiana protagonizada por una familia en la que se producen una serie de circunstancias que hacen que los unos se enfaden con los otros, hasta que un pequeño gran gesto de la mascota les devuelve la armonía. La propuesta destaca por sus ilustraciones, fotografías de figuras en relieve elaboradas con plastilina.
¡Viva Zorba!
¡Menudo día! Cuando esta mañana Zorba me ha preguntado: «¿Juegas conmigo, Julio?», rápidamente he dicho que sí. A decir verdad, no me lo ha preguntado exactamente así, porque Zorba es un perro, pero lo conozco bien y enseguida entiendo lo que quiere decirme.