Fibonacci. El soñador de números
Podéis llamarme Soñador, si queréis. Todo el mundo lo hace.
Un día, cuando yo era solo un niño, el maestro nos planteó un problema de matemáticas y nos dio diez minutos para resolverlo. Yo lo resolví en dos segundos.
Yo soy así con los números. Me han gustado desde que era muy pequeño. En casa de mis padres, dondequiera que mirase encontraba cosas para contar.
Ese mismo día en clase, los demás alumnos hacían sus cálculos matemáticos en los ábacos y anotaban sus respuestas en cifras romanas...