Novela epistolar de enorme éxito. Una anciana fuerte y vital presiente la muerte y quiere dejar a su nieta, que la ha acompañado durante mucho tiempo, un testimonio de su modo de enfrentarse a la vida, que puede leerse como un sutil y optimista manual de supervivencia. Con una prosa intimista, casi susurrante, Tamaro nos acerca con ternura a un adiós, que sin embargo prescinde de dramatismo, sensiblería o paternalismos y es una invitación al disfrute de todos los rincones de la existencia.
Novela epistolar de enorme éxito. Una anciana fuerte y vital presiente la muerte y quiere dejar a su nieta, que la ha acompañado durante mucho tiempo, un testimonio de su modo de enfrentarse a la vida, que puede leerse como un sutil y optimista manual de supervivencia. Con una prosa intimista, casi susurrante, Tamaro nos acerca con ternura a un adiós, que sin embargo prescinde de dramatismo, sensiblería o paternalismos y es una invitación al disfrute de todos los rincones de la existencia.
Donde el corazón te lleve
Opicina, 16 de noviembre de 1992
Hace dos meses que te fuiste y desde hace dos meses, salvo una postal en la que comunicabas que todavía estabas viva, no he tenido noticias tuyas. Esta mañana, en el jardín me detuve largo rato ante tu rosa. Aunque estamos en pleno otoño, resalta con su color púrpura, solitaria y arrogante, sobre el resto de la vegetación, ya apagada. ¿Te acuerdas de cuando la plantamos? Tenías diez años y hacía poco que habías leído El Principito. Te lo había regalado yo como premio por tus notas. Esa historia te había encantado.