Doña Eremita hereda un viejo auto de su tío. Por variados motivos, el coche va perdiendo los tapacubos, los guardabarros y el resto de la carrocería hasta que se queda solo con el chasis. Su tío y los amigos de este contemplan maravillados el coche de doña Eremita y la admiten en su grupo de moteros. Álbum divertido, lleno de humor y con las clásicas e inconfundibles ilustraciones de Quentin Blake. Entusiasmará a lectores de diversas edades desde los 6 años en adelante.
Doña Eremita hereda un viejo auto de su tío. Por variados motivos, el coche va perdiendo los tapacubos, los guardabarros y el resto de la carrocería hasta que se queda solo con el chasis. Su tío y los amigos de este contemplan maravillados el coche de doña Eremita y la admiten en su grupo de moteros. Álbum divertido, lleno de humor y con las clásicas e inconfundibles ilustraciones de Quentin Blake. Entusiasmará a lectores de diversas edades desde los 6 años en adelante.
Doña Eremita, reina de la carretera
Una mañana doña Eremita bajó las escaleras y encontró una carta sobre el felpudo. Se la leyó a Mambrú, su perro fiel. Decía: Querida Anastasia. Como me voy a comprar una moto, ya no necesito mi viejo auto. Te lo quiero regalar. Está afuera, en la calle. Aquí te envío las llaves. Con cariño: tu tío Cosmo.