Jugar es, quizá, la labor más importante que realizará nunca un niño, aquella para la que viene mejor dotado ‘de serie’ y a cuyo servicio pone toda su inteligencia y el mayor de los entusiasmos. María Pascual nos regala un álbum que recoge, de forma amena, las normas de uso de algunos juegos populares y detrás del que anida un indudable amor por un modelo de infancia en el que el juego al aire libre y las experiencias compartidas con los amigos, se erigen en uno de los fundamentos de la educación vital del niño. Pero este bullicioso álbum es también una reivindicación del tiempo y del espacio necesarios para esa actividad lúdica, reclamando, así, los momentos de esparcimiento en la interminable agenda de obligaciones de los niños y un espacio público a la medida de las necesidades de los pequeños. La divertida y vivaracha troupe que transita por las ilustraciones es un canto a la alegría inherente al juego compartido y a su indudable carácter transformador, como simboliza uno de los personajes cuyo aspecto va mutando a su antojo, pues el juego le permite convertirse en quien o en lo que desee ser. Un libro disfrutón y, en cierta medida, nostálgico. ¿Salimos a jugar?
Jugar es, quizá, la labor más importante que realizará nunca un niño, aquella para la que viene mejor dotado ‘de serie’ y a cuyo servicio pone toda su inteligencia y el mayor de los entusiasmos. María Pascual nos regala un álbum que recoge, de forma amena, las normas de uso de algunos juegos populares y detrás del que anida un indudable amor por un modelo de infancia en el que el juego al aire libre y las experiencias compartidas con los amigos, se erigen en uno de los fundamentos de la educación vital del niño.... Seguir leyendo
¿Sales a jugar?
I. ESCONDITE INGLÉS
En este juego, hay quien prefiere caminar y hay quien prefiere contar.
Si te toca contar, tienes el poder de paralizar a todos con la mirada. Existen varios trucos para manejar ese poder. Puedes alargar mucho las palabras mientras cuentas: "¡Uuuuuuun, doooooos, treeeeees, al escondiiiiiiteeeeee ingléééééés!"; o decirlas muy, muy rápido para pillar a los demás en pleno movimiento: "¡Undostresalesconditeinglés!". De todas las tácticas, la más infalible es hacer como que vas a contar y, de pronto, darte la vuelta.
Si te toca avanzar, no es lo mismo hacerlo sin riesgos ni aventura y así asegurar la llegada, que desafiar el equilibrio con posturas imposibles e ir acercándote a la pared: unas veces con largos pasos de jirafa, otras con diminutos pasos de hormiga o con saltos de liebre... Y tú, ¿qué prefieres?