La carta de amor que escribe Gaetano a la niña que vive en la casa de enfrente y que se asoma cada día a la ventana azul, da la vuelta al mundo: el cartero la pierde, un perro la agarra con su boca, el perro es atropellado por un coche y muere, la farmaceútica del barrio tira la carta a la basura, la carta llega hasta África... Cuando Gaetano ya es un anciano, la carta llega a manos de su querida Laura, que le contestará con otra carta de amor. Un viaje circular que se inica y finaliza en el mismo lugar, una historia que se repite, un final abierto. Todo esto se cuenta en unas pocas páginas, pero transcurre a lo largo de toda una vida.
La carta de amor que escribe Gaetano a la niña que vive en la casa de enfrente y que se asoma cada día a la ventana azul, da la vuelta al mundo: el cartero la pierde, un perro la agarra con su boca, el perro es atropellado por un coche y muere, la farmaceútica del barrio tira la carta a la basura, la carta llega hasta África... Cuando Gaetano ya es un anciano, la carta llega a manos de su querida Laura, que le contestará con otra carta de amor. Un viaje circular que se inica y finaliza en el mismo lugar, una historia que se repite, un final abierto.... Seguir leyendo
Te quiero un montón
Gaetano ya es mayor. Hasta se atreve con las películas de miedo. Desde su ventana del sexto piso puede ver la ventana azul que está al otro lado de la calle, justo enfrente. Cuando se asoma, observa cómo se extiende la ciudad calle abajo. Los repartidores, los carteros, los demás niños del barrio... todo el mundo tiene prisa. Cada mañana, antes de ir al colegio, Gaetano se toma su tiempo: abre la ventana y se queda mirando la ventana azul de enfrente. Allí vive una niña.