Dicen que los nacionalismos se curan viajando. Lo que está claro es que si los niños y niñas de todas las nacionalidades se acercan a curiosear las múltiples historias que contiene el ovillo narrativo de ¡Todo el mundo!, este puede ser un lugar mejor. Mediante un ágil y divertido texto basado en deducciones, bromas y realidades sobre la gente que se ve obligada a abandonar su país para vivir en otro, salpicado de imágenes caricaturescas y distintos gags, el lector reflexiona sobre la necesidad de alcanzar la armonía y la buena convivencia en el planeta dado que todos procedemos y nos dirigimos al mismo lugar.
Dicen que los nacionalismos se curan viajando. Lo que está claro es que si los niños y niñas de todas las nacionalidades se acercan a curiosear las múltiples historias que contiene el ovillo narrativo de ¡Todo el mundo!, este puede ser un lugar mejor. Mediante un ágil y divertido texto basado en deducciones, bromas y realidades sobre la gente que se ve obligada a abandonar su país para vivir en otro, salpicado de imágenes caricaturescas y distintos gags, el lector reflexiona sobre la necesidad de alcanzar la armonía y la... Seguir leyendo
¡Todo el mundo!
Todos los seres humanos descienden de la primera persona que vivió en África. Todo el mundo tiene los mismos antepasados. Nuestros tatara-tatara-tatara-tatara-y-noventa-mil-vecesmás-tatarabuelos-y-abuelas vivieron allí hace siete millones de años. Por eso todos los seres humanos se parecen.