Conocimos a Pingüino hace tiempo, cuando estaba de vacaciones. Ahora nos encontramos con el simpático personaje sumido en una pequeña investigación: ha encontrado, en medio del polo, una extraña manopla en torno a la que no hay indicios de marcas ni huellas. Este misterio le lleva a indagar entre los amigos y familiares con el objetivo de localizar al misterioso dueño. En el camino se une Bootsy con quien comparte aficiones como la costura y junto a la que va a vivir la mayor de las aventuras, con el beneplácito de los pájaros frailecillos y otros animales a los que siempre tratan de ayudar. Una historia con sabor dulce, cargada de sentimientos, que culmina en el punto más alto de su amistad. Imágenes tiernas y diversos juegos de planos mantienen la estructura y estética habitual de otras propuestas de la autora.

Conocimos a Pingüino hace tiempo, cuando estaba de vacaciones. Ahora nos encontramos con el simpático personaje sumido en una pequeña investigación: ha encontrado, en medio del polo, una extraña manopla en torno a la que no hay indicios de marcas ni huellas. Este misterio le lleva a indagar entre los amigos y familiares con el objetivo de localizar al misterioso dueño. En el camino se une Bootsy con quien comparte aficiones como la costura... Seguir leyendo