La curiosidad a veces provoca estos pequeños conflictos. Al abrir el libro hemos despertado a la gatita, que descansaba plácidamente de un día ajetreado (si es que los gatos tienen jornadas así). La interacción de la protagonista con el lector lleva a descubrir los aspectos más placenteros del sueño e invita a seguir el ejemplo y dormir junto a ella. Editado en pequeño formato con puntas redondeadas y páginas de gran gramaje, para favorecer su manipulación por parte de los más pequeños, el relato puede ser un simpático aliado de padres y educadores a la hora de inducir el deseo de reposar en los niños a través del humor. El plano gráfico está resuelto con una serie de primeros planos del felino que va transformando su expresión y las tonalidades de los fondos en función de la conversación que mantiene con nosotros. 
	La curiosidad a veces provoca estos pequeños conflictos. Al abrir el libro hemos despertado a la gatita, que descansaba plácidamente de un día ajetreado (si es que los gatos tienen jornadas así). La interacción de la protagonista con el lector lleva a descubrir los aspectos más placenteros del sueño e invita a seguir el ejemplo y dormir junto a ella. Editado en pequeño formato con puntas redondeadas y páginas de gran gramaje, para favorecer su manipulación por parte de los más pequeños, el relato puede... Seguir leyendo
 
 ¡Duerme, gatita, duerme!

	¡Ey!
	Vuelve a cerrar el libro.
	¿No ves que estoy durmiendo?
	¡No!
	¡No conseguirás despertarme!