La tendencia a no aceptar la responsabilidad de los errores y a evadirse de la culpa es el eje central de esta obra, que incluye de forma sutil, además, una interesante reflexión sobre la importancia de cada animal para el equilibrio de la naturaleza. Ilustrado a partir de originales collages, por los que desfila un texto encadenado, divertido e irreverente, el libro invita a jugar, ya sea memorizando o a través del recitado, gracias a la disparatada sucesión de protagonistas. Esa estructura obliga al lector a recordar a un buen número de animales y lo que les sucede. La composición resulta muy adecuada para leer en voz alta junto a los más pequeños de la casa. La obra ha sido incluida en el listado de títulos del Plan Nacional de Lectura de Portugal.
La tendencia a no aceptar la responsabilidad de los errores y a evadirse de la culpa es el eje central de esta obra, que incluye de forma sutil, además, una interesante reflexión sobre la importancia de cada animal para el equilibrio de la naturaleza. Ilustrado a partir de originales collages, por los que desfila un texto encadenado, divertido e irreverente, el libro invita a jugar, ya sea memorizando o a través del recitado, gracias a la disparatada sucesión de protagonistas. Esa estructura obliga al lector a recordar a un buen número de animales y lo... Seguir leyendo
¡Yo no he sido!
¡Vamos, vamos, gordita mía!
¡Que ya es hora!
¡Uaaa...!
¡Una araña enorme!
¡Toma! ¡Y toma!
¡Ahí te quedas!
¡Puafff...!