Tiempo de setas en el bosque y Oso no ha querido desaprovechar la ocasión para llevar a la mesa tres ricos ejemplares que Comadreja recibe con alegría. La emoción inicial y la buena sintonía entre ambos se difumina en el momento del reparto: Oso presenta las razones que justifican una más en su plato. Por su parte, Comadreja rebate sus argumentos y aduce otros motivos para que sea ella la comensal principal. Y mientras tanto, un personaje astuto y pícaro escucha y observa atentamente la escena dispuesto a pasar a la acción... ¿Qué crees que va a pasar? ¿Estará ya frío el plato recién cocinado? ¿Habrá acuerdo entre los protagonistas? Las divertidas ilustraciones se centran en la "cocina" del bosque y la mesa que comparten ambos personajes. El acercamiento progresivo de un tercer protagonista, escondido entre los árboles, aporta dinamismo a las escenas, diseñadas en tono caricaturesco, que recogen la transformación en los estados de ánimo de ambos animales humanizados. Un inteligente álbum ilustrado que constituye toda una técnica para la resolución de conflictos, ideal para la lectura en voz alta.
Tiempo de setas en el bosque y Oso no ha querido desaprovechar la ocasión para llevar a la mesa tres ricos ejemplares que Comadreja recibe con alegría. La emoción inicial y la buena sintonía entre ambos se difumina en el momento del reparto: Oso presenta las razones que justifican una más en su plato. Por su parte, Comadreja rebate sus argumentos y aduce otros motivos para que sea ella la comensal principal. Y mientras tanto, un personaje astuto y pícaro escucha y observa atentamente la escena dispuesto a pasar a la... Seguir leyendo
Dos para mí, una para tí
Volviendo a casa, Oso encontró tres setas.
Comadreja estaba muy emocionada.
Las limpió, las tostó, las sazonó con mucha
sal y pimienta y las cocinó a fuego lento
en la sartén con un poco de perejil.
Oso las sirvió.
- Una seta para mi y una para ti -dijo-.
Y la otra para mí. Es lo justo. Soy grande
y tengo que comer mucho.