Aunque a veces disimulen muy bien, los niños observan atentamente los movimientos de sus padres y madres, e identifican con precisión los conflictos personales que viven sus progenitores. La protagonista de esta historia sabe con certeza los momentos de depresión, alegría, pasividad... el catálogo completo de variaciones emocionales que su mamá experimenta en cada jornada. Consciente de esas variables, aprovecha al máximo los instantes y juegos más imaginativos y le da todo su calor y afecto en los menos luminosos. Un bello retrato de la convivencia diaria y del vínculo entre madres e hijas retratado con sensibilidad a través de un texto rico en matices, y las figuras estilizadas y los escenarios oníricos y terrenales que sugiere Dani Padrón. El apartado gráfico, elaborado a través de herramientas digitales, amplifica las dudas y emociones de la niña con lirismo. La historia alcanzó la final en el I Premio de Cuentos Infantiles organizado por la editorial Algar.
Aunque a veces disimulen muy bien, los niños observan atentamente los movimientos de sus padres y madres, e identifican con precisión los conflictos personales que viven sus progenitores. La protagonista de esta historia sabe con certeza los momentos de depresión, alegría, pasividad... el catálogo completo de variaciones emocionales que su mamá experimenta en cada jornada. Consciente de esas variables, aprovecha al máximo los instantes y juegos más imaginativos y le da todo su calor y afecto en los... Seguir leyendo
A veces mamá tiene truenos en la cabeza
A veces mamá tiene nubes en la cabeza.
Se le olvida el almuerzo y llegamos tarde a los cumples.
Cenamos croquetas dos días seguidos.
Cuando mamá tiene nubes en la cabeza
sopla como un globo y se deshincha cuando se sienta en el sillón.