Las hadas de Villaviciosa de Odón
Las niñas están jugando en el arroyo de la Vega. Han bajado por el camino blanco, entre los trigales recién segados, por el camino duro y agrietado que se hinca en la tierra al acercarse el arroyo, y se llena de pronto de frescura y del olor dulce de los juncos.
A las niñas les gusta jugar en el arroyo, que viene de las huertas pequeñito y manso, y que tiene una playa de tierra blanca rodeada de matas de juncos y de menta, entre los álamos altos.