Antón llega al parque dispuesto a divertirse. Allí, dos niñas juegan en el arenero sin prestarle atención, a pesar de los esfuerzos de Antón por impresionarlas con sus disparatadas ideas. Cuando se cae y empieza a llorar, reparan en él. Y entonces aparece Lucas cargado de juguetes... Un final abierto que invita al lector a imaginar y señala el camino para dialogar sobre las difíciles relaciones entre distintos sexos durante la infancia. Las ilustraciones, muy narrativas e irónicas, trasmiten cómo sienten y piensan los personajes.Antón llega al parque dispuesto a divertirse. Allí, dos niñas juegan en el arenero sin prestarle atención, a pesar de los esfuerzos de Antón por impresionarlas con sus disparatadas ideas. Cuando se cae y empieza a llorar, reparan en él. Y entonces aparece Lucas cargado de juguetes... Un final abierto que invita al lector a imaginar y señala el camino para dialogar sobre las difíciles relaciones entre distintos sexos durante la infancia. Las ilustraciones, muy narrativas e irónicas, trasmiten cómo sienten y piensan los personajes.
Antón y las chicas
Aquí viene Antón. Antón está feliz. Antón tiene un cubo. Antón tiene una pala. Antón tiene un coche grande.