El premiado y polifacético James Mayhew vuelve con Carlota, esta vez para mostrarnos algunos ejemplos de pintura puntillista. Para refrescarse del sofocante calor que hace en el museo, Carlota decide chapotear junto a los Bañistas de Asnières, de Georges Seurat. Un accidente hace que el agua salga del cuadro e inunde el museo. Para arreglar el lío, recorre cuatro cuadros más que le proporcionarán aventuras y problemas. Al final del libro, los niños encontrarán una pequeña descripción de la técnica puntillista y una breve biografía de cada uno de los autores mencionados.El premiado y polifacético James Mayhew vuelve con Carlota, esta vez para mostrarnos algunos ejemplos de pintura puntillista. Para refrescarse del sofocante calor que hace en el museo, Carlota decide chapotear junto a los Bañistas de Asnières, de Georges Seurat. Un accidente hace que el agua salga del cuadro e inunde el museo. Para arreglar el lío, recorre cuatro cuadros más que le proporcionarán aventuras y problemas. Al final del libro, los niños encontrarán una pequeña descripción de la técnica puntillista y una breve biografía de cada uno de los autores mencionados.
Carlota y los bañistas
Hacía un día soleado, Carlota y su abuela estaban molestas a causa del calor. -Vámonos a nadar -dijo la abuela-. Iré a buscar los bañadores. Cuando llegaron, la piscina ya estaba repleta. -No importa, volveremos más tarde -dijo la abuela-. El museo está cerca. Vayamos un rato.