Al presentar el libro la autora apuntó que se trata de la historia de un joven, «una vida de lucha, de esfuerzo, de ganas de vivir, un chaval que ha sido capaz de superar muchas dificultades». Después sabemos que se trata de una historia basada en hechos reales y que el protagonista compartió vacaciones y charlas con la escritora. Quizá por todo ello, nos encontramos ante una obra profundamente realista que impacta al lector por el descarnado dibujo que presenta de la realidad marginal y delictiva de muchos jóvenes. Es un relato lleno de dramatismo, violencia social y psicológica, pero que ofrece a los lectores una lección –nada paternalista– de esperanza.
Al presentar el libro la autora apuntó que se trata de la historia de un joven, «una vida de lucha, de esfuerzo, de ganas de vivir, un chaval que ha sido capaz de superar muchas dificultades». Después sabemos que se trata de una historia basada en hechos reales y que el protagonista compartió vacaciones y charlas con la escritora. Quizá por todo ello, nos encontramos ante una obra profundamente realista que impacta al lector por el descarnado dibujo que presenta de la realidad marginal y delictiva de muchos jóvenes. Es un relato lleno de... Seguir leyendo
El poso amargo del café
Tendría que estar muerto y no lo estoy. Pero a pesar de no estarlo, me encuentro en el infierno. Como si la estatua del Ángel caído, que nos mostró mi padre a mi hermano y a mí en uno de nuestros paseos por el Tiro, se hubiese salido por fin con la suya: «Te reconozco, tú eres de los míos, un rebelde sin causa, algún día terminarás en el infierno, como yo», me decía siempre que pasábamos por su lado. A mí me daba un cague que no veas, y es que hasta físicamente me encontraba parecido con ese tal Lucifer que un buen día decidió desobedecer a Dios y pasar de ángel a demonio. Mi hermano, en cambio, se identificaba con la estatua de Alfonso XII...