Los viajes maravillosos del hada Lilú
Los habitantes del planeta Azur tienen una curiosa costumbre: todas las mañanas, cuando los tres soles se levantan por detrás de la montaña negra, echan una carrera.
–Señor –le pregunta Lilú a un corredor montado en una bañera–, ¿sabe usted cuáles son los premios que recibirán los que lleguen primero?
–Veamos –reflexiona éste–. Se puede ganar un pollito que sabe leer, un tesoro de cinco huevos, un cepillo de dientes que predice el futuro y una barra de pan mágica gigante.