Seguramente no sea posible entender el nacimiento, la consolidación y la decadencia del poderoso Imperio romano sin la ayuda de su rica mitología. El mito de Rómulo y Remo, dos huérfanos amamantados por una loba y originarios fundadores de Roma, la función de los grandes dioses romanos como Júpiter, Juno o Neptuno o de los dioses «domésticos» como lares y penates, el rapto de las Sabinas y la aparición del cristianismo, que «acabó» con los dioses romanos, son analizados en este libro.
Seguramente no sea posible entender el nacimiento, la consolidación y la decadencia del poderoso Imperio romano sin la ayuda de su rica mitología. El mito de Rómulo y Remo, dos huérfanos amamantados por una loba y originarios fundadores de Roma, la función de los grandes dioses romanos como Júpiter, Juno o Neptuno o de los dioses «domésticos» como lares y penates, el rapto de las Sabinas y la aparición del cristianismo, que «acabó» con los dioses romanos, son analizados en este libro.
Mitología romana
Para los romanos, los dioses están por todas partes, en todo momento. Por ese motivo, se haga lo que se haga, hay que tener en cuenta su voluntad. Un ejemplo: cuando nace un niño, ya cuenta con una legión de divinidades que se encargan de su desarrollo: Cumina le protege en la cuna, Estatulino le enseña a tenerse en pie, Rumina a mamar, Fabulino a caminar... Lo mismo ocurre con la cosecha o en caso de una guerra o una batalla: todas las etapas de la vida están prescritas bajo el signo de una multitud de dioses.