A partir de su popular personaje, Elmer, el elefante de muchos colores, David McKee desarrolla una fábula con una enseñanza moral. Su capacidad para desarrollar personajes y escenarios, la cercanía que tiene el protagonista con el lector infantil y la siempre presente situación lúdica hacen que el tono didáctico de la fábula no resulte tan pesado y que se mantenga dentro de la línea de las otras historias de Elmer. A partir de su popular personaje, Elmer, el elefante de muchos colores, David McKee desarrolla una fábula con una enseñanza moral. Su capacidad para desarrollar personajes y escenarios, la cercanía que tiene el protagonista con el lector infantil y la siempre presente situación lúdica hacen que el tono didáctico de la fábula no resulte tan pesado y que se mantenga dentro de la línea de las otras historias de Elmer.

Elmer y los hipopótamos

Elmer, el elefante multicolor estaba charlando animadamente con el León y Tigre cuando llegaron tres elefantes muy enfadados.
–Elmer –dijo uno–, los hipopótamos han venido a vivir a nuestro territorio.
–Diles que se vayan –pidió el segundo–. Aquí no hay sitio para todos.
–¿Y si no se quieren ir? –preguntó Elmer.
–Pues les obligaremos –amenazó el tercero.
–Bueno –dijo Elmer–, hablaré con ellos.