Tras su apariencia fría y distante, a pesar de sus tornillos, engranajes y de las gotas de aceite que engrasan su existencia, los robots también tienen sentimientos. Hay días que amanecen tristes, otros contentos. Hay máquinas dispuestas a emocionarse y tener pajaritos en el estómago, frente a otras que se encuentran vacías. El catálogo completo de estos seres necesita de la ayuda del lector para descubrir, mediante sencillos pero eficaces troqueles, la amplia variedad de autómatas que pueblan este y otros mundos. Una divertida propuesta que hará las delicias de los más pequeños y puede sembrar el interés por la ciencia ficción, de un modo muy particular, desde las primeras edades a la vez que da a conocer una gran cantidad de términos antagónicos.
Tras su apariencia fría y distante, a pesar de sus tornillos, engranajes y de las gotas de aceite que engrasan su existencia, los robots también tienen sentimientos. Hay días que amanecen tristes, otros contentos. Hay máquinas dispuestas a emocionarse y tener pajaritos en el estómago, frente a otras que se encuentran vacías. El catálogo completo de estos seres necesita de la ayuda del lector para descubrir, mediante sencillos pero eficaces troqueles, la amplia variedad de autómatas que pueblan este y otros mundos. Una divertida... Seguir leyendo