A partir de las experiencias vitales de conocidos personajes internacionales que han destacado en diversos campos y que siempre se han caracterizado por su firme compromiso medioambiental, Benedetto y Ciliento componen una selección de relatos, de los que resaltan -con una tipografía mayor y diferente color al resto del texto-; citas y fragmentos sugerentes. Todos ellos encaminados a inculcar en los lectores infantiles, aunque probablemente necesiten apoyo de un adulto, dada la complejidad de algunas de las propuestas, la necesidad de luchar contra la implacable destrucción del medio ambiente antes de que sea demasiado tarde. Testimonios y reflexiones basadas en los discursos, publicaciones, reflexiones e intervenciones públicas de estrellas del cine y la música como Leonardo di Caprio, Emma Watson o Björk; reputadas zoólogas como Dian Fossey, “eco-diseñadores” (Tiziano Guardini); políticos (Al Gore, Wangari Maathai, Bob Brown…); filósofas y escritoras (Vandana Shiva); líderes indígenas (Rigoberta Menchú); impulsores del agroecologismo como Pierre Rabhi, empresarios concienciados (el ex deportista Yvon Chouinard); fotógrafos universales (Sebastiâo Salgado); y por supuesto activistas como Jadav Payeng o la mediática Greta Thunberg. Todos plantan su semilla en este proyecto grupal con el deseo de sembrar un futuro mejor para los niños.
A partir de las experiencias vitales de conocidos personajes internacionales que han destacado en diversos campos y que siempre se han caracterizado por su firme compromiso medioambiental, Benedetto y Ciliento componen una selección de relatos, de los que resaltan -con una tipografía mayor y diferente color al resto del texto-; citas y fragmentos sugerentes. Todos ellos encaminados a inculcar en los lectores infantiles, aunque probablemente necesiten apoyo de un adulto, dada la complejidad de algunas de las propuestas, la necesidad de luchar... Seguir leyendo
Cuentos para niños y niñas que quieren salvar el mundo
Todos somos semillas
Vandana se quita sus zapatos azules, los tira más allá de la mecedora en la que se está meciendo y corre hacia Mira, su hermana mayor, invitándola a seguir hasta el huerto. Mira, sonríe y deja que la pequeña la guíe. Vandana se mueve a sus anchas, saltando ligera entre las hileras de tomates y sandías. Con los pies descalzos, siente la tierra húmeda; sabe dónde está sembrado y por dónde puede andar tranquilamente.