Muchos padres y madres, especialmente los primerizos o los que tienen hijos únicos, tienden a sobreproteger durante, al menos, los primeros compases de las vidas de los pequeños (algo que probablemente se ha acentuado a raíz de la pandemia). Se trata de una actitud natural, intrínseca al ser humano que, sin embargo, puede limitar seriamente el desarrollo y la autonomía de los niños. En clave de humor J. C. Andrés retrata con acierto escenas habituales en cualquier casa, demostrando que si aplicas la cordura en cada caso es posible hacer felices a ambas partes. Bruno, por fin, ha conseguido jugar libremente, aunque sea sintiéndose observado a cada instante, ahora tendrá más fácil entablar nuevas amistades y aprender a realizar cosas que solo hacía tutorizado por sus familiares. Un álbum divertido y luminoso, con el encanto habitual de las creaciones gráficas firmadas por José Fragoso, que aporta una genuina enseñanza sin caer en moralinas, en el que –por momentos- encontramos elementos propios del lenguaje del cómic.
Muchos padres y madres, especialmente los primerizos o los que tienen hijos únicos, tienden a sobreproteger durante, al menos, los primeros compases de las vidas de los pequeños (algo que probablemente se ha acentuado a raíz de la pandemia). Se trata de una actitud natural, intrínseca al ser humano que, sin embargo, puede limitar seriamente el desarrollo y la autonomía de los niños. En clave de humor Seguir leyendo
¡Ten cuidado, Bruno!
Como todas las mañanas, Papá y Mamá despertaron
con mucho cuidado a Bruno.
Lo bañaron, lo peinaron y lo vistieron.
Tomaron un desayuno a base de vitamina C, calcio y cereales,
vamos, que desayunaron zumo de naranja, un vaso
de leche y cereales.
- ¡Ten cuidado, Bruno!- le dijeron cuando se manchó con el zumo.