Y más allá, el mar
-¡Es un coche! -exclamó mi padre.
-¡Pero no será un coche nuevo! -comentó mi madre-. Todavía no hemos podido permitirnos el lujo de un coche nuevo, ni nos lo podremos permitir nunca. Sea lo que sea lo que tú crees ver.
-Si fuera un coche, podría significar un largo viaje -dijo mi abuela Mummo.
-¿Y qué otra cosa podría ser esto, si no? -preguntó mi padre.
-Si me lo dieras, podría decírtelo -respondió Mummo.