La perdiz disfruta de un radiante día de verano en compañía de sus diez perdigones. Pasean, se dan un baño de polvo y se acaban encontrando con el erizo. Hace calor, pero el verano está llegando a su fin. Solo hay que mirar al cielo para saberlo. Los lectores conocerán en este álbum a animales que suelen permanecer ocultos, la perdiz y el erizo, y de paso aprenderán a fijarse en las transformaciones que se producen en la naturaleza. Tal es el mérito de este álbum: brindar una mirada atenta y amable hacia un hábitat típicamente mediterráneo en un momento de cambio. Lo hace de una forma hermosa y delicada, tanto a través del texto como de las ilustraciones. Una buena manera de despertar la conciencia ecológica.
La perdiz disfruta de un radiante día de verano en compañía de sus diez perdigones. Pasean, se dan un baño de polvo y se acaban encontrando con el erizo. Hace calor, pero el verano está llegando a su fin. Solo hay que mirar al cielo para saberlo. Los lectores conocerán en este álbum a animales que suelen permanecer ocultos, la perdiz y el erizo, y de paso aprenderán a fijarse en las transformaciones que se producen en la naturaleza. Tal es el mérito de este álbum: brindar una mirada atenta y amable hacia un... Seguir leyendo
El último día de verano
De buena mañana, mientras los campos permanecen en silencio, un sol brillante se alza en el cielo. El verano toca a su fin y hace un día claro y hermoso.
Resguardada del sol, bajo el follaje de un árbol, crece una mata de aromático romero. De repente, una cabecita asoma de su interior. Es la perdiz, que aprovechando el fresco de la mañana, sale a pasear.